Por Luis Fernando García Forero.- En la celebración del Día de la Tierra, este jueves 22 de abril, la Organización de las Naciones Unidas – ONU – hizo un llamado de socorro a toda la humanidad para tomar conciencia que estamos acabando con nuestro planeta, por eso clama por una economía más sostenible que funcione tanto para las personas, como para el lugar dentro del universo donde convivimos.
“Promovamos la armonía con la naturaleza y la Tierra. ¡Únete al movimiento mundial para restaurar la madre Tierra!”, fue el mensaje dado a conocer por la ONU al señalar que “Con este panorama general y el escenario del coronavirus, nuestra prioridad inmediata es evitar la propagación de COVID-19, pero a largo plazo, es importante abordar la pérdida de hábitat y biodiversidad”.
La situación del planeta es sumamente grave según lo señala ese organismo mundial. A pesar de los esfuerzos actuales, la biodiversidad se está deteriorando en todo el mundo a un ritmo sin precedentes en la historia humana. Se estima que alrededor de un millón de especies animales y vegetales se encuentran actualmente en peligro de extinción.
“La Madre Tierra claramente nos pide que actuemos”, señala el informe, donde destaca que los océanos se están llenando de plásticos y se vuelven más ácidos. El calor extremo, los incendios forestales y las inundaciones, así como una temporada de huracanes en el Atlántico que ha batido récords, han afectado a millones de personas.
Peor aún, según la ONU, “Ahora nos enfrentamos al COVID -19, una pandemia sanitaria mundial con una fuerte relación con la salud de nuestro ecosistema”.
Registra el documento dado a conocer en la celebración del Día de la Tierra que el cambio climático, las acciones provocadas por el hombre contra la naturaleza, así como los crímenes que perturban la biodiversidad: deforestación, cambio de uso del suelo, producción agrícola y ganadera intensiva, o el creciente comercio ilegal de vida silvestre, pueden aumentar el contacto y la transmisión de enfermedades infecciosas de animales a humanos (enfermedades zoonóticas).
De acuerdo con el PNUMA (Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente), una nueva enfermedad infecciosa emerge en los humanos cada 4 meses. De estas enfermedades, el 75% provienen de animales. Esto muestra las estrechas relaciones entre la salud humana, animal y ambiental.
Restaurar acaba pobreza
En el informe anotan que los ecosistemas sustentan todas las formas de vida de la Tierra. De la salud de nuestros ecosistemas depende directamente la salud de nuestro planeta y sus habitantes. Restaurar nuestros ecosistemas dañados ayudará a acabar con la pobreza, a combatir el cambio climático y prevenir una extinción masiva.
Recuerda la ONU que el Decenio de las Naciones Unidas para la Restauración de los Ecosistemas, que se lanzará oficialmente el Día Mundial del Medio Ambiente, el 5 de junio, ayudará a prevenir, detener e invertir la degradación de los ecosistemas en todos los continentes y en todos los océanos.
“Sólo lo conseguiremos si todo el mundo pone de su parte”, señala en forma contundente la ONU al invitar a todas las naciones que en el Día Internacional de la Madre Tierra se necesitan cambios hacia una economía más sostenible que funcione tanto para las personas como para el planeta.
Importancia de biodiversidad para los humanos
Señala en los apartes de su informe la ONU que el brote de coronavirus representa un riesgo enorme para la salud pública y la economía mundial, pero también para la diversidad biológica.
El organismo mundial enfatiza que la biodiversidad puede ser parte de la solución porque “una diversidad de especies dificulta la propagación rápida de los patógenos”.
La ONU pone de presente que los cambios en la biodiversidad afectan el funcionamiento de los ecosistemas y pueden ocasionar alteraciones importantes de los bienes y servicios que estos proporcionan.
En el documento establecen que los vínculos específicos entre la salud y la biodiversidad incluyen posibles impactos en la nutrición, la investigación sanitaria y la medicina tradicional, la generación de nuevas enfermedades infecciosas y cambios significativos en la distribución de plantas, patógenos, animales e incluso asentamientos humanos, algo que puede ser alentado debido al cambio climático.
“Estamos en esta lucha juntos con nuestra Madre Tierra”, anota en sus apartes sobre el tema la ONU.
Cambio Climático
“Estamos a punto de perder la oportunidad de limitar el calentamiento global a 1,5°C”, destaca la investigación de dicho organismo mundial al llamar la atención de que si solo nos confiamos en los compromisos climáticos actuales del Acuerdo de París, es posible que las temperaturas aumenten 3,2 °C este siglo.
“El planeta ya vive un calentamiento de 1,1 °C, un fenómeno que ha devastado familias, hogares y comunidades”, señala el informe por eso la ONU es contundente en señalar que “se necesita cerrar la brecha entre lo que estamos haciendo y lo que debemos hacer para prevenir los efectos más graves del cambio climático”.
Los científicos que estudiaron el tema son contundentes en señalar que “Los gobiernos no pueden darse el lujo de esperar. Las personas y las familias no pueden darse el lujo de esperar. Las economías deben tomar el camino de la descarbonización ahora”.
Frenar calentamiento
Pero en el informe hay señales esperanzadoras. “Todavía tenemos la oportunidad de frenar el calentamiento global en 1,5 °C. De acuerdo con los científicos, este nivel de calentamiento es el que está asociado a los efectos menos devastadores. Cada fracción de calentamiento adicional a 1,5 °C resultará en impactos cada vez más severos y costosos.
En el infome destacan que los científicos están de acuerdo en que, “para encaminarnos a limitar el aumento de la temperatura global a 1,5 °C, las emisiones deben caer rápidamente a 25 gigatoneladas para 2030”.
¿Cuál es el desafío?
Se necesitan compromisos, políticas y acciones que reduzcan las emisiones de 7,6% cada año entre 2020 y 2030.
“Sólo así PODEMOS limitar el calentamiento global a 1,5 °C”, destaca el importante documento de la ONU.
Bogotá, D. C, 22 de abril de 2021
