Por Felicia Saturno Hartt. Fotos: Hannover Messe News.- Con un invitado de lujo y más de 5.000 expositores y un cuarto de millón de visitantes, que abarrotaron los pabellones del recinto Ferial de Hannover durante toda la semana, se realizó la mayor feria de tecnología industrial del mundo: Hannover Messe.
La Feria de Hannover comenzó en 1947 en un edificio de una fábrica en Laatzen, al sur de Hannover, mediante un arreglo con el gobierno militar británico, con el objetivo de impulsar el avance económico durante la posguerra.
Debido a su éxito, la feria se repitió de ahí en adelante cada año, contribuyendo grandemente al éxito de la plaza de Ferias y remplazando a la ciudad de Leipzig, en Alemania Oriental, como la principal ciudad de ferias.
En 1980, el crecimiento de la industria de la información y las telecomunicaciones obligó a los organizadores, Deutsche Messe AG a dividirla dando como resultado la CeBIT.
El evento no tiene el atractivo de otras citas tecnológicas del año, porque está enfocado sobre todo a la maquinaria pesada y la industria de la robótica, pero sus cifras son la envidia del sector.
Por primera vez, en los 70 años que se lleva celebrando la feria, EEUU fue elegido como país invitado pero es también una oportunidad para dar impulso a una feria que, en los últimos años, y a consecuencia del impacto de la crisis económica en el sector industrial, estaba perdiendo relevancia.
Los organizadores apuntaron que la mayor economía del mundo está liderando un proceso de reindustralización en el que los datos, la energía limpia y sobre todo la robótica tendrán un papel protagonista.
La automatización fue de hecho una de las claves de la septuagésima edición de la feria, que se celebró bajo el impulso de la llamada Internet Industrial de las Cosas o IIoT.
Es una adaptación del concepto de Internet de los objetos al mundo de la fabricación y con el que las grandes industrias esperan mejorar la eficiencia de los procesos de trabajo y automatizar muchos de los pasos que, hoy todavía, tienen que ser supervisados por personas.
Armados con mejores sensores y permanentemente conectados entre sí, los diferentes componentes de una cadena de producción serán capaces de comunicarse, descubrir fallos y corregirlos en mucho menos tiempo.
Desde Ecos invitamos a nuestros lectores a explorar la website de la Feria de Hannover para observar las tendencias industriales del futuro, ya muy cercano: http://www.hannovermesse.de/