Carlos Ibáñez Muñoz

"LA BARBARIE, LAS ATROCIDADES, LAS MASACRES, LAS DESAPARICIONES, LOS ASESINATOS, EL DESPLAZAMIENTO, LAS FOSAS COMUNES, LA INTIMIDACIÓN, etc. todos tras su codiciado trofeo: EL PODER POLÍTICO Y ECONÓMICO."

Por Carlos Ibáñez Muñoz*. - Sin ningún perfil ideológico y soportado en las evidencias narradas y probadas, la contribución de la JEP al esclarecimiento de la verdad, la no repetición y a la reparación del daño en el conflicto armado en Colombia ha sido fundamental a pesar de los obstáculos que interpusieron varios actores y protagonistas de la gran tragedia colombiana y que neutralizó a buena hora la Corte Constitucional y la comunidad internacional. 

He visto desfilar por ese estrado judicial en audiencias a los actores políticos y a las fuerzas regulares e irregulares del Estado; guerrilla, paramilitares, fuerzas armadas y políticos, confesando bajo un común denominador: LA BARBARIE, LAS ATROCIDADES, LAS MASACRES, LAS DESAPARICIONES, LOS ASESINATOS, EL DESPLAZAMIENTO, LAS FOSAS COMUNES, LA INTIMIDACIÓN, etc. todos tras su codiciado trofeo: EL PODER POLÍTICO Y ECONÓMICO.

Por todo ello cuando suben al escenario de la justicia especial los protagonistas, se sacuden las redes sociales justificando o rechazando tan viles procedimientos; ello contribuye a polarizar más el país y a abrir más heridas alabando a uno u otro bando perpetradores de crímenes, ya sean guerrilleros, paramilitares, o de las fuerzas armadas so pretexto de consolidar una posición ideológica. Para todos ellos y sus macabros procedimientos debe levantarse la voz y una actitud de rechazo de la mayoría de los colombianos.

La violencia y la delincuencia permeo la sociedad colombiana como consecuencia de un Estado ausente, sin autoridad, indolente, distanciado de los anhelos populares, sociedad esta que convive con el crimen y lo tolera resignándose a ver los actores armados de distinto pelambre ideológico pasearse por sus regiones, por sus barrios y localidades imponiendo sus órdenes y violentando la democracia ante un Estado impávido y tolerante.

Si acuden los excombatientes de la Farc a confesar sus bárbaros crímenes sale la derecha a replicar y a censurar a los castro chavistas, bolivarianos o comunistas y si el turno es para los paramilitares se asoma la izquierda a denostar de sus procedimientos y a catalogarlos de fachistas, reaccionarios, exterminadores de derechos y libertades y si se presentan los militares le atribuyen al Estado el epíteto de genocida y violador de los derechos humanos.

En fin en esta tragicomedia no hay inocentes, todos fuimos actores culpables por acción u omisión e hipócritamente al permitir con anuencia del Estado que el crimen y el delito se posicionará en todas las clases sociales y se enseñoreara en Colombia.

Este proceso que vivimos y nos causa repulsa, con la fe del carbonero esperamos que muy pronto sea superado.

Enero 23 del 2024

*Doctor en Derecho y Ciencias Políticas, especialista en derecho Constitucional y Laboral. Exalcalde de Bucaramanga.

Write comment (0 Comments)
Carlos Villota Santacruz

“Es crear un escenario a nuevas generaciones de la "Ciudad de la Luna", desde una óptica de nuevos saberes, a partir de su riqueza humana, patrimonio y naturaleza”.

Por Carlos Villota Santacruz*. Con la llegada del mes de enero de 2024, la administración del Alcalde Leonardo Donoso tiene la responsabilidad y la oportunidad de construir un Plan de Desarrollo focalizado, participativo y aterrizado en materia gerencial.

Este diálogo abierto ciudadano entre el sector público, privado, la academia, los gremios y los ciudadanos, debe tener una consigna: crecer de manera sostenible en materia turística

En mi calidad de experto en marketing de ciudad y ex asesor Internacional del Carnaval de Negros y Blancos de la ciudad de Pasto -Departamento de Nariño (Patrimonio de la Humanidad) edificar un turismo destino distinto, es posible. "Es necesario para los habitantes de la ciudad de Chia. Crear una incubadora turística desde la educación y pedagogía orientada a los niños y jóvenes"

En otras palabras, es crear un escenario a nuevas generaciones de la "Ciudad de la Luna", desde una óptica de nuevos saberes a partir de su riqueza humana, patrimonio y naturaleza.

De esta manera, se dará al servicio del visitante nacional y extranjero una gama de recorridos y experiencias que  dinamicen la economía local y regional.

La ciudad de Chía tiene desde su geografía (en el departamento de Cundinamarca) la posibilidad de darle vida a un turismo inteligente. "En otras palabras, el uso adecuado del territorio por tierra y aire. Una transformación ecodigital, generando beneficios a los diferentes actores del turismo".

Lo que viene ahora, es un trabajo colaborativo desde la óptica económica. Un laboratorio a aumentar la productividad de las empresas. "Los retos no son menores. La tecnología se debe ver como una inversión desde una acción de innovación. Todo desde una estructura organizativa flexible. Estamos en presencia de un turista digital. Hacer de la Big Data una experiencia individual y colectiva. Capacitar al talento humano de manera permanente".

A propósito de este comentario, usted qué piensa?

Chia 28 de enero 2024

*Internacionalista, experto en marketing de ciudad, marketing político, periodista. Escritor Coautor del libro "Gobierne bien y hágalo saber". Twitter X@villocol 

E mail: Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.   Celular 3106675926

Write comment (0 Comments)
Víctor G Ricardo

“Llegó el momento de parar la polarización y buscar un acuerdo nacional para trabajar unidos por un mejor mañana”. 

Por Víctor G Ricardo*. -Colombia está enferma por varias razones.  Está enferma por el alto grado de corrupción en que nos encontramos; enferma porque la ética y la moral están en crisis; enferma porque la inseguridad que vivimos tanto en las ciudades como en el campo está llegando  a su máximo límite; enferma por que los líderes están escondidos sin asumir la responsabilidad que tienen; enferma porque tenemos una mayor pobreza y desigualdad; enferma porque en las distintas ramas del poder público no hay ejecuciones o hay muy malas administraciones; enferma porque la desconfianza se agudiza y la polarización se profundiza. En fin!!!!  Enferma porque la apatía e incertidumbre la llevan a la sala de cuidados intensivos.

Tenemos que ser conscientes que si no paramos los conflictos y nos ponemos a trabajar por un mejor futuro en breve llegaremos al fondo del abismo y en ese momento ya no será tan fácil rescatar al país de la descuadernada en que nos encontramos.

Por otra parte varios sectores de la economía están en crisis o en grave riesgo, y así lo demuestran las caídas observadas en algunos sectores de la industria, el agro y la construcción, la disminución en la confianza del consumidor y las aún muy altas tasas de interés.

Y como si lo anterior fuera poco nos enfrentamos a los retos de estabilidad regional y global, pues está claramente demostrado que conflictos que se presenten en cualquier parte del mundo pueden generar presiones importantes en nuestro país, como sucede con el costo de los combustibles, los fertilizantes, los alimentos por mencionar solo algunos.

Llegó el momento de parar la polarización y buscar un acuerdo nacional para trabajar unidos por un mejor mañana.  Tenemos que superar nuestras diferencias, abandonar los fanatismos, entender y respetar al otro y construir un sueño común que nos permita contar con una agenda nacional y regional que permita sanar a nuestro país enfermo.

Tenemos un lindo país dotado de una gran riqueza medio ambiental y recursos naturales, por unas gentes dotadas de gran inteligencia y capacidad emprendedora, con buenos trabajadores y lo único que nos hace falta es la claridad de la responsabilidad de la hora presente y la voluntad de llegar a grandes acuerdos en beneficio de todos.

No quisiera ser negativo y pesimista, pero la verdad es que sino generamos conciencia de la enfermedad que estamos padeciendo difícilmente vamos a ponernos de acuerdo para corregir el rumbo y trabajar por un país donde impere la equidad, se restablezca el orden, se recuperen los valores perdidos, se fortalezca la institucionalidad de un país de derecho, cerremos las brechas entre el desarrollo y la pobreza, donde integremos las dos Colombia que las separa el abismo de la desigualdad y la injusticia social, donde recuperemos la seguridad de las ciudades y el campo y donde derrotemos la corrupción y el delito y hagamos un país donde impere la justicia y la rectitud.

Siempre los médicos nos han dicho que el primer paso para sanarnos es identificar la enfermedad y sus causas y a partir de allí definir el tratamiento que restablecerá nuestro estado de salud.  Es por esto que en esta oportunidad bajo el llamado a reconocer que nuestro país está enfermo, he querido con el optimismo que siempre me caracteriza, llamar la atención en este primer paso que debe conducir a construir juntos el menor tratamiento.

Si lo logramos y trabajados con objetivos comunes nuestros descendientes se sentirán orgullosos de sus padres, líderes y dirigentes y no desilusionados como hoy se ve en un porcentaje muy alto de nuestra ciudadanía y país.

Bogotá, D, E, 28 de enero 2024

*Excomisionado de Paz

Write comment (0 Comments)
Simón Gaviria

“Atraer los colombianos de los más altos ingresos no solo mejoraría impuestos al pagar otros tributos sino mejoraría el emprendimiento.”

Por Simón Gaviria*. - Ya vamos con 15 reformas tributarias en los últimos 25 años, con la gravedad que la tributaritis se ha acelerado: Santos en ocho años hizo cuatro, Duque en cuatro años hizo tres, y, Petro en menos de dos años, ya va para su segunda. La mayoría empezó con la promesa de ser estructurales, como esta, prometieron subir la renta de personas naturales para disminuir la exagerada renta corporativa. Según German Vargas más de 70,000 colombianos emigraron del país para no ser cobijados por el código tributario. En vez de pensar como apretar tuercas a los asalariados, no hay mucho que hacerles, se debería pensar en el tema de fondo: acabar el concepto de ingreso global de renta para los colombianos. En otras palabras, hacer el ajuste, pero limitarlo a los ingresos derivados en el país, para lograr atraer talento y reconstruir base tributaria.

Tan innovadores como sean los asesores de Min Hacienda, por mucho tiempo mentes brillantes vienen asfixiando a grandes contribuyentes desde la DIAN para después ir a asesorarlos. Si bien el concepto de renta global existe desde 1974, en las últimas ocho tributarias una multiplicidad de multas, aumentos de impuestos, reglamentaciones anti-técnicas, y amenazas penales, hicieron a Colombia quedar 38 de 38 en el Índice de Competitividad Tributaria de la OECD. Tan “exitosos” fueron, que es probable que ningún gran contribuyente de persona natural todavía viva en el país o no haya pasado sus bienes a una sociedad en el exterior. Este proceso se aceleró cuando un falso temor de expropiación a la Venezuela del existente gobierno, llevó a muchos a empezar estas maniobras no solo por razones tributarias sino en defensa de su patrimonio.

Cuando un país solo tiene 12 convenios activos de doble tributación, donde ni si quiera está su principal socio comercial EEUU, el cual no comparte información tributaria, residir en Colombia obliga a un empresario globalizado a pagar impuesto dos veces. Una inversión en la Florida paga impuesto en EEUU y después en Colombia por la misma utilidad. Para aquellos colombianos cuyos impuestos genuinamente mueven la aguja fiscal, vivir en Colombia cuesta mucho. Los que se rehúsan a irse, muchas veces pasan sus activos a empresas en el exterior.

Sin meterse en la complejidad de deducciones, ingresos declarados por personas naturales de rentas internacionales son $159 mil millones, la medida en el mejor de los casos recauda $55.500 millones. Puede que suene mucho, pero es ínfima en un presupuesto de $502 billones. Pagar solo por ingresos nacionales en persona natural haría al país más atractivo. Para nuestra diáspora, el ingreso global les hace prohibitivo regresar a Colombia, aún ya pensionados. Sobra decir, no somos competitivos contra destinos de segundas viviendas como Panamá o Republica Dominicana.

Ser competitivos no solo frenaría el desangre migratorio, inclusive si es bien diseñado, podría atraer personas de otras jurisdicciones. Atraer los colombianos de los más altos ingresos no solo mejoraría impuestos al pagar otros tributos sino mejoraría el emprendimiento. El beneficio tributario es mínimo para una medida que expulsa talento obviamente hay mucho consultor que depende de ella.

Bogotá, D. C, 29 de enero 2024

*Expresidente de la Cámara de Representantes

Write comment (0 Comments)
Fernando Cepeda Ulloa

"Gracias a su abstención políticos indeseables son elegidos. Y después se quejan estos abstencionistas. Pero son los principales responsables. Si ellos votaran en favor de candidatos loables, con trayectorias respetables, la situación sería completamente diferente".

Por Fernando Cepeda Ulloa*. -Me desagrada leer o escuchar con frecuencia que el presidente de la República o un gobernador o alcalde o ministro está participando en política, como si eso fuera algo indebido o inaceptable en una democracia. Y en algunas ocasiones he expresado mi desacuerdo con la utilización de ese concepto para criticar a las autoridades públicas. Recientemente, el presidente Petro planteó la conveniencia de que los 13 partidos de izquierda que conformaron el pacto histórico, ahora gobernante, se unieran para así contar con una estrategia que haga viable un mejor desempeño electoral de las diferentes fuerzas de izquierda en las elecciones de 2026 y, supongo, en la siguientes.

Si algún legado político se espera del gobierno de Gustavo Petro es, precisamente, el de que como resultado de su gestión durante estos cuatro años la izquierda quede consolidada como una alternativa viable de gobierno, tal como ocurre en buena parte de los países democráticos.

Criticar como participación indebida en política esta propuesta del Presidente me parece que es una afirmación resultado de una muy equivocada concepción de la vida política y del concepto mismo de política. Hasta los silencios del Presidente constituyen una participación en política. Y ello es evidente. Por ejemplo, la no condenación de los actos terroristas del grupo Hamas ha sido un silencio que continúa siendo criticado y condenado, inclusive, en la última entrevista que ha otorgado el embajador interino de los Estados Unidos en Bogotá. Lo propio ocurre con el silencio del Presidente o de la Cancillería o de los partidos políticos o de los gremios con respecto a los planteamientos públicos del Presidente Maduro sobre la región del Esequibo en la Guyana. Y así podría mencionar muchos silencios. Y por ello se paga un precio político.

Es como el tema de los abstencionistas. Quienes no votan en las elecciones, en ocasiones el 50% o más, dicen que no participan en política. Que no les gusta. Pero ellos son mucho más responsables del resultado electoral que los que votan en las elecciones. Gracias a su abstención políticos indeseables son elegidos. Y después se quejan estos abstencionistas. Pero son los principales responsables. Si ellos votaran en favor de candidatos loables, con trayectorias respetables, la situación sería completamente diferente.

La participación en política es de la esencia en una democracia. Sería absurdo limitar esa participación a los que están ejerciendo funciones eminentemente políticas. Lo que corresponde es que esa ciudadanía que se viene discutiendo desde los griegos y romanos en la época clásica se ejerza eficazmente por parte de todos los ciudadanos, de los gremios, de las asociaciones profesionales etc.

Las leyes sobre participación en política son recientes y responden a un concepto nuevo que es el de la democracia participativa. Planteamiento que busca una mayor interacción del ciudadano con la vida colectiva, pública y privada. Es así como se ha incrementado la participación de los ciudadanos en las decisiones públicas en el Congreso, inclusive en las propias Cortes, en las universidades, en los colegios. Los gobiernos anuncian con anticipación algunas decisiones que se hacen públicas para recibir comentarios. Y lo propio se hace con nombramientos en cargos importantes.

Vivimos otro tipo de sociedad de la que conocieron nuestros padres o nuestros abuelos. Pero lo importante es lo que los griegos llamaban la isonomía, o sea, que todos nos regimos por las mismas leyes, obedecemos las mismas leyes, gozamos de los mismos derechos y participamos, por igual, con nuestras opiniones, con nuestro voto, en diversos momentos de la formulación de decisiones públicas. Mientras mejor y más atentos ciudadanos seamos mucho mejor será la democracia y, por lo tanto, la formulación de las políticas y de las decisiones que a todos nos conciernen.

Bogotá, D. E, 27 de enero 2024

*Analista Político, Catedrático. Exministro de Estado

Write comment (0 Comments)
Amylkar D Acosta M

“Exhorto al Gobierno y en especial al Ministerio de Minas y Energía a dar señales que incentiven el ahorro y el uso eficiente de energía para no vernos abocados a un escenario catastrófico como lo sería un eventual racionamiento”. 

Por Amylkar D. Acosta M*.- Ni el Cambio climático es un cuento chino, como afirmó el inefable e inescrutable ex presidente de EEUU Donald Trump ni el Niño es un juego, como denominó la Ministra de ambiente y desarrollo sostenible Susana Muhamad al anunciar el pasado 5 de octubre su fallida estrategia de atención y prevención de los incendios forestales, que proliferan en este momento en todo el país sin encontrar una respuesta eficaz por parte del Gobierno, que no se había preparado para enfrentar esta contingencia.

Para Donal Trump “El cambio climático es un invento que pretende proteger la naciente industria china, perjudicando la industria americana. Este fenómeno no está demostrado y no tiene un sustento real”. No obstante, fue nada menos que la Agencia Nacional de Evaluación del Clima, la que en su Informe cuatrienal, avalado además por la Academia Nacional de Ciencias, del cual le hizo entrega, la que le salió al paso a semejante exabrupto y lo refutó. Para dicha Agencia “la evidencia del Cambio climático abunda, desde lo más alto de la atmósfera hasta las profundidades de los océanos”.

El Cambio climático, entonces, es una realidad incontrovertible y se ha convertido en uno de los principales issues de la política pública en todo el orbe, tendiente a enfrentarlo, contrarrestarlo, mitigar sus devastadores efectos. Periódicamente se realizan las conferencias de las partes (COP), que organiza la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC, por sus siglas en inglés), para su monitoreo, evaluación y toma de decisiones, siendo la más importante de ellas la COP21, la que le dio vida al Acuerdo de París, mediante el cual 196 países adquirieron el compromiso de reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), cuya acumulación en la atmósfera es la causante del aumento de la temperatura a nivel global, provocando fenómenos extremos tales como La Niña y el Niño. El primero viene acompañado de temporada lluviosa y el segundo de sequía.

Estos fenómenos extremos tienen tres características: la primera es que no son estacionales ni tienen periodicidad, razón por la cual son imprevisibles, es imposible preverlos, sólo se pueden pronosticar con algún grado de acierto y ello cuando la temperatura de los océanos, que constituyen el mayor disipador de calor del planeta, sube, lo cual es un indicio de su proximidad. En segundo lugar, son cada vez más frecuentes y en tercer lugar son cada vez más intensos y duraderos y por lo tanto sus estragos son cada vez mayores. El más reciente fenómeno de La Niña duró, por primera vez en lo que va corrido de este siglo, tres años.

Pues bien, el pasado 4 de noviembre la Ministra Muhamad declaró oficialmente el advenimiento de El Niño luego de que el Instituto de Hidrología y Meteorología (IDEAM) “luego de realizar seguimiento a la temperatura del océano Pacífico y establecer que durante cinco trimestres consecutivos se registraron valores superiores a 0.5º centígrados”. Aunque nadie puede asegurar hasta cuándo se prolongue, se estima que puede extenderse hasta abril o junio, siendo los meses de febrero y marzo los más impactantes, cuando se sentirá con mayor intensidad.

La afectación del fenómeno de El Niño en la operación del Sistema interconectado nacional (SIN) no se puede subestimar, pues pondrá a prueba, una vez más su solidez y resiliencia. Tanto más en cuanto que el 68% de la capacidad instalada de generación (19 GW) es de origen hídrico, lo que lo torna vulnerable frente a los embates de El Niño, con el agravante de que de los 23 embalses de los cuales se sirven las hidroeléctricas sólo uno de ellos, El Peñol de Guatapé posee una capacidad de regulación  mayor al año, las demás sólo soportan 4 meses.

Con el agregado del nivel actual de los embalses en el 60.6% el 23 de enero, 9.6 puntos porcentuales por debajo del nivel del pasado 31 de diciembre y con aportes hídricos de 79,48 gigavatios hora día, por debajo del 50%, del volumen histórico que se registran actualmente, el Sistema interconectado nacional (SIN) dependerá cada vez más del parque térmico, el cual a lo sumo puede satisfacer el 55% de la demanda. Preocupa aún más saber que los meses más críticos serán los de marzo y abril. Al paso que vamos las menores precipitaciones pueden conducir a limitar la capacidad de generación hasta los 100 GWHD, que al cotejarse con los 220GWHD que se consumen la baja del nivel de los embalses es ineluctable, que en condiciones de hidrología crítica podrían llegar hasta el 53% o 54%, lo que obligaría a encender todas las alarmas ante el riesgo inminente de racionamiento.

El riesgo es mayor de ponerse en práctica la cuestionada Resolución CREG 701 028 de 2023, pues al establecer el tope de $532 el KWH induce a las hidroeléctricas a ofertar precios por debajo del mismo y al ser despachadas “gastan” la reserva de agua almacenada para enfrentar el recrudecimiento del Fenómeno de El Niño. Máxime cuando, debido al atraso en la ejecución de varios proyectos claves de generación la oferta de energía  (225 GWHD) está a ras con bola con la demanda (222 GWHD), con un margen de maniobra que no supera el 5%, al tiempo que esta última ha venido creciendo por encima del 6%, el doble de la proyección de la UPME en su Plan energético 2050 para 2021 – 2035, entre 2.28% y 2.68%

Exhorto al Gobierno y en especial al Ministerio de Minas y Energía a dar señales que incentiven el ahorro y el uso eficiente de energía para no vernos abocados a un escenario catastrófico como lo sería un eventual racionamiento. Recordemos cómo fue posible en 2015 que, ante los amagos de racionamiento, la exitosa campaña “apagar paga”, gracias a la cual se ahorró un 5% en el consumo de energía, lo evitó.

Cota, enero 27 de 2024

*Economista, expresidente del Congreso y exministro de Minas y Energía.

www.amylkaracosta.net

Write comment (0 Comments)
José Felix Lafaurie Rivera

"Una caída en las exportaciones, de carne principalmente, es una amenaza para la ganadería y el desarrollo social de sus regiones". 

Por José Félix Lafaurie Rivera*. -No voy a tocar el tema de la transición energética, pero sí a recordar que este y otros gobiernos han planteado una menor dependencia de la “renta petrolera” dentro de la canasta exportadora, a partir de fortalecer las exportaciones agropecuarias, las ganaderas entre ellas. 

Para Fedegán el tema va más allá del aporte al proceso diversificador. Las exportaciones tienen un efecto en la modernización productiva y esta sobre los precios y la rentabilidad, que redundan en bienestar al ganadero y mejoramiento de la vida rural. Así pues, una caída en las exportaciones, de carne principalmente, es una amenaza para la ganadería y el desarrollo social de sus regiones. 

Gracias al objetivo gremial exportador, que incluyó la recuperación del estatus de país libre de fiebre aftosa, el esfuerzo modernizador en producción sostenible y una intensa actividad comercial, las exportaciones de carne y animales crecían desde 2020, con ventas por 267,1 millones de dólares, una disparada en 2021 con 427,4, hasta 2022 con 502,4 millones, superando la meta de 500 millones en exportaciones cárnicas. 

No fue fácil, pues además del reto de los altos estándares de los mercados, enfrentamos las narrativas contra nuestra actividad. Hay que exportar, pero si exportamos animales, con estricto cumplimiento de protocolos de sanidad y bienestar, recibimos el “matoneo mediático” de animalistas extremos; y si exportamos carne, somos causantes del alto precio al consumidor y de la inflación. 

En efecto, entre 2020 y 2022 el precio de la carne al consumidor aumentó a la par con las exportaciones, pero no por causa de estas últimas, sino del fenómeno inflacionario mundial que afectó a todos los productos. En 2023, sin embargo, esta tendencia positiva se detuvo, con exportaciones de carne y animales por 305,6 millones de dólares a noviembre, por debajo de las de 2021. 

¿Qué pasó? Primero: la inflación mundial cedió y bajó el precio internacional. Segundo: Mientras el peso se apreció en beneficio de los importadores, el real brasilero, la moneda del gran vendedor en la región se devaluó y su carne alcanzó mayor competitividad - precio; y tercero, como lo que uno gana otro lo pierde, nuestra menor competitividad por tasa de cambio llevó al cierre, entre agosto y septiembre, de las dos plantas de la multinacional Minerva, responsable del 90% de las exportaciones. 

¿En qué estamos? Primero: frente al riesgo latente de la retirada de Minerva, porque las multinacionales ponen sus huevos donde hay mejores condiciones para que la rentabilidad incube, lo cual representaría el colapso exportador y una verdadera catástrofe para nuestra ganadería, porque el precio, con su mayor cota en mayo de 2022 a $9.600 kilo/potrero/ báscula, hoy ronda los $7.400 y podría caer a $6.500. 

Segundo: A diferencia de lo sucedido en el mundo —disminución del precio al consumidor—, en Colombia la carne mantiene un precio “establemente alto”, a pesar de que el del ganado cayó en más del 20%. Ya sucedió en 2009, cuando se desplomaron las exportaciones a Venezuela, cayó el precio del ganado, pero no se redujo un peso el precio al consumidor. 

¿Quién se quedó y hoy se queda con ese margen billonario? Un segmento de intermediarios ociosos que, al amparo de la informalidad, se convierten en formadores efectivos de precios y verdaderos buitres que devoran el esfuerzo ganadero y el bolsillo del consumidor. 

Es una situación que le he hecho saber a las carteras de Agricultura y Comercio, pues tan importante como persistir en el esfuerzo exportador, es eliminar las distorsiones del mercado interno en beneficio de quienes producen y quienes compran. 

Nota Bene. La próxima semana: Si por la carne llueve, por la leche no escampa. 

Bogotá, D. E, 26 de enero 2024. 

*Presidente de FEDEGAN 

@jflafaurie

Write comment (0 Comments)
Hubert Ariza

“Mientras apaga incendios y enciende pasiones en los corazones de los sectores sociales, Petro ratifica que dará la pelea para que en la Casa de Nariño ondee la bandera de la izquierda por otros cuatro años”. 

Por Hubert Ariza*.  En los primeros días del año, la temperatura política en Colombia ha alcanzado máximos no registrados en muchos años, lo que anuncia un 2024 caliente, en el que la polarización aumentará, la oposición se radicalizará y el Gobierno deberá acelerar su marcha, recuperar a la opinión pública y demostrar orden, coordinación y resultados para cumplir los anhelos del presidente Petro de consolidar una organización capaz de reelegir su ideario en 2026. 

A la par que arden las montañas en varias zonas del país y se hacen ciertos los pronósticos sobre el impacto del fenómeno de El Niño, que ha desnudado la crisis que vive la entidad estatal encargada de atender esa tragedia natural, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), el Gobierno vive un gran incendio político, en el que el presidente actúa como un gran bombero, por la suspensión provisional por tres meses del canciller Álvaro Leyva, ordenada por la procuradora Margarita Cabello, quien está a menos de un año de terminar su periodo legal.

Leyva enfrenta un juicio disciplinario por supuestas faltas que el Ministerio Público considera cometió a título de dolo, en uno de los escándalos que más ha llamado la atención de la opinión pública en los últimos meses y le costó la cabeza a la directora de la agencia de Defensa Jurídica del Estado, Martha Lucía Zamora, quien se atrevió a cuestionar a Leyva y denunció su equivocada estrategia jurídica y sus agresiones verbales.

Se trata del contrato por 117.000 millones de pesos para la elaboración de pasaportes con la firma Thomas Greg & Sons, en el que se ha visto involucrado el hijo del canciller, y el presidente ha mantenido su posición de que Leyva solo cumplía órdenes suyas. Para la Procuraduría, el funcionario investigado presuntamente violó los principios que rigen la contratación estatal. 

Independiente de los argumentos jurídicos y el resultado de este proceso de la Procuraduría ―a la que sectores afectos al Gobierno acusan de estar al servicio de la agenda política de la oposición, al igual que la Fiscalía y la Defensoría del Pueblo, hoy en manos de amigos personales del expresidente Iván Duque―, el daño reputacional al Gobierno está hecho. 

Para el embajador en Argentina, Camilo Romero, “hoy hay un riesgo democrático en Colombia por el secuestro de los entes de control a manos de la politiquería. Van es por el contradictor, la defensa de sus causas personales y los intereses de sus amigos, no por el bien común”. Es por ello que la Procuraduría ha sido señalada desde varios sectores como una de las entidades que debería ser reestructurada e incluso suprimida en una reforma a la justicia. Tanto la Fiscalía como la Defensoría tendrán nuevos jefes este año, en decisión que le corresponderá asumir al Congreso de la República. 

El presidente Petro ha reaccionado con fuerza a la suspensión de su ministro ―quien encabezaba la eventual lista del cambio de Gabinete―, recordando sus días como alcalde de Bogotá, cuando el procurador Ordóñez le tumbó varios secretarios de despacho y lo destituyó, lo que fue un enorme favor que lo catapultó como víctima de la intolerancia de un fanático religioso. Gracias a Ordóñez, Petro construyó el mito comunicacional del líder perseguido por luchar por los derechos del pueblo, que venció a la caverna y volvió al poder con el apoyo del pueblo y de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, cuya sentencia obligó revisar y adecuar la normatividad sobre los procesos disciplinarios de los mandatarios elegidos popularmente. 

La salida temporal del canciller fortalece el discurso del Presidente de que hay una conspiración para sacarlo del poder ―antes incluso había hablado de un golpe blando― y de la necesidad de unir la variopinta alianza de movimientos y partidos que conforman el Pacto Histórico en una sola colectividad que permita “elegir otro gobierno progresista para que podamos profundizar esto, porque 200 años de olvido no se solucionan en cuatro años, pero hay que comenzar ya y a profundidad”. 

Petro, en ese sentido, ha convocado a un congreso progresista, en el que participen las 1.500 personas elegidas en 2023. Esta iniciativa no ha encontrado el eco esperado, pues varios partidos ya anunciaron que no se fusionarán ni renunciarán a sus personerías jurídicas, lo que sería ceder su autonomía al sector orientado por el presidente, allanándole el camino a la candidatura que él imponga. 

Mientras apaga incendios y enciende pasiones en los corazones de los sectores sociales y las poblaciones más marginales, el jefe de Estado ratifica que dará la pelea para garantizar que en la Casa de Nariño ondee la bandera de la izquierda por otros cuatro años. Por supuesto, la oposición, que no aún no ha presentado el anunciado tigre que retorne la derecha al poder, contraataca celebrando la derechización de la población, ante el creciente desencanto de los jóvenes con la izquierda y la asfixia colectiva por la incapacidad del Estado de blindar las ciudades de la acción depredadora de los delincuentes y la percepción de mano blanda con los grupos criminales. 

Petro está en el campo de batalla apagando incendios. Un hombre como él, formado en el fuego de la revolución, se debe sentir en su medio ambiente natural. El 1 de mayo del año pasado, en la posesión de sus nuevos ministros, dijo: “Vamos hacia un campo de batalla. Hay que triunfar”. Y ordenó a sus funcionarios trabajar al doble del ritmo habitual. Alguno de esos ministros saldrá pronto en el anunciado remezón ministerial. Y usó en aquella ocasión, por primera vez, la palabra reelección. “He pedido que en donde están nuestras prioridades el Gobierno trabaje día y noche. Trabajar de noche también implica duplicar el periodo presidencial o sea que eso equivale a una reelección”, dijo. 

Hoy, nuevamente, la palabra reelección está de moda. No porque quienes la usen vivan en la Luna, sino porque el presidente ha mandado las señales claras de que va por el poder presidencial en 2026, aun en cuerpo ajeno. Al igual que Álvaro Uribe, que está alimentando un tigre que le presentará al país pronto. Ojalá ese felino no esté muy cerca de las montañas, donde arde Colombia y la fauna sufre. 

Petro está en campaña permanente, abriéndole camino a un acuerdo nacional, con el presupuesto estatal al servicio de su visión de país, fortaleciendo los sectores sociales, impulsando en el Congreso las reformas aplazadas por varias décadas, con cifras favorables en el campo económico y otras menos plausibles en protección de la vida de los líderes sociales y firmantes de paz, y seguridad. Pero no se ve claro que, con las encuestas en su contra, tenga asegurado el poder en 2026. Además, el incendio político no parece estar pronto a apagarse y dejará muchas cenizas a su paso.

El mandato presidencial de que “hay que alistarse y defender la paz. Hay que defender el derecho de los pueblos a la justicia y la equidad. Una de esas defensas es apurar el paso para lograr los objetivos del programa Colombia Potencia Mundial de la Vida”, quiere activar en toda Colombia la búsqueda del poder desde las bases populares. La campaña presidencial para reelegir lo que Petro llama un Gobierno Popular y Democrático comenzó fuerte. Sí, el presidente apaga incendios, pero también le echa fuego a un país polarizado, atizando el ambiente con su sentencia de que “no nos van a dejar gobernar”.

Bogotá, D. C, 26 de enero de 2024 

*Periodista, internacionalista y analista político. 

Tomado de El País.

Write comment (0 Comments)
Gabriel Ortiz

“El presidente Petro, debe entrar en un raciocinio que le permita permanecer en tierra, porque desde la virtualidad, desde el aire y desde otras dimensiones, es imposible gobernar”.

Pasan los días, los meses y más de un año, sin que alumbren los cambios anunciados por un gobierno que se montó sobre promesas y más promesas, para solucionar todo lo malo que soportaba Colombia.

Con la simple X trata de solucionar millares de incógnitas que formula un pueblo que esperaba ejecuciones racionales, reales y prontas.

Obstinación e intolerancia, enmarcan los propósitos del gobierno Petro, que no admite pensamiento alguno al resto de una nación a la que le encomendaron gobernar sin camisas de fuerza.

Petro llegó a la Casa de Nariño, con un arrume de reformas que el pueblo y el congreso empezaron a analizar, como siempre se acostumbraba. Pero desde el primer día notificó que sus textos y su voluntad eran inmodificables. Tal vez olvidó que son tres, los poderes a los que encarga la Constitución el manejo de este país.

En medio de sus inagotables viajes por el mundo, acompañado de nutridas comitivas, que cuestan millones de dólares, Petro tercamente ha        querido pasar la reforma a la salud sin permitir modificación alguna. Para completar, encargó al obstinado Guillermo Jaramillo defenderla, a su manera.

Este porfiado funcionario auto declarado enemigo de las vacunas en un país amenazado por el covid, dejó vencer 1.080.000 de ellas, mientras la población está sometida al virus.

En este gobierno, en el que al parecer todo marcha manga por hombro, ministros y colaboradores le toman el pelo a un mandatario “regañón”. Por ejemplo, el presupuesto del año anterior, solo se ejecutó en un 87.3% y para completar el titular de salud se salió del ruedo para, inconsultamente proponer una nueva reforma tributaria, que aumentó el descontento entre los colombianos por su presidente. Hay despilfarro y gastos suntuarios, mientras falta plata para cosas elementales, como para el mantenimiento de los aviones de la FAC.

Solo salen dineros a borbotones para viajes presidenciales que se multiplican, ante la carrera contrareloj de Petro, por adueñarse del liderazgo del mundo contra el calentamiento del planeta. Los demás países y jefes de Estado, siguen utilizando combustibles fósiles y exportándolos para no caer en el empobrecimiento.

Volviendo al tema de la salud, la situación es grave, porque se insiste en reformas innecesarias. 18 reconocidos exministros de salud y hacienda, empresarios y gente pensante, consideran que la reforma es atropellada, desafortunada, desacertada, preocupante y patética. Casi ninguno de sus objetivos, tienen juicio.

Hay temas, en ella, que se pueden adelantar con elementales decretos ministeriales. Pero Jaramillo le pide a la Corte Constitucional pronunciarse. Jaramillo desconoce las normas que le concede la ley.

El presidente Petro, debe entrar en un raciocinio que le permita permanecer en tierra, porque desde la virtualidad, desde el aire y desde otras dimensiones, es imposible gobernar. Debe conocer el país de la belleza y gobernarlo. No insistir en lo que hizo con Bogotá durante su alcaldía. Su destreza está en el parlamento, no en el ejecutivo. Ni el cambio, ni el remedio aparecen.

BLANCO: El esfuerzo del alcalde Galán para garantizar la seguridad en la capital.

NEGRO: El país está ardiendo, por acción de los pirómanos que incendian nuestros bosques.

Bogotá, D. C, 26 de enero de 2024

*Periodista. Exdirector del Noticiero Nacional, Telematinal y Notisuper.

Write comment (0 Comments)
Juana Yolanda Bazán Achury

“El propósito de la ley es crear medidas restaurativas, que los alejen del sistema punitivo penal acusatorio, considerando a los menores infractores como víctimas de sus conductas siendo sujetos de restablecimiento de derechos”.

Por Juana Yolanda Bazán Achury*. - En los meses de octubre y diciembre de 2023, un número significativos de jóvenes adolescentes en conflicto con la Ley Penal, se evadieron de los centros de internación o resocialización, de varias ciudades del país en los que cumplían las penas impuestas por sus infracciones, algunos se han podido reingresar a los programas de rehabilitación que son muy pocos.

Lo anterior, sumado a los menores adolescente que se encuentran en trámite de judicialización por actividades criminales, junto con aquellos que son utilizados por las bandas organizadas del microtráfico y otras actividades ilícitas como el hurto, el porte ilegal de armas, que es la asociación para delinquir; han puesto sobre la mesa nuevamente el debate sobre la eficacia del Sistema de  Responsabilidad Penal para menores de edad y adolescentes, consagrado en la Ley 1098 de 2006 y la Ley 1878 de 2018.

La política criminal diseñada en este cuerpo normativo, se orienta desde el principio de responsabilidad como supuesto filosófico, el cual contrasta con el impacto en la sociedad.

Un mirada a las estadísticas de los menores infractores, acudiendo al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), y a los Centros de Servicios Jurídicos para Adolescentes (CESPA), evidencian un aumento de los delitos cometidos por los menores de edad en los últimos años; desde el estudio de la política criminal, el análisis del impacto de la conducta de los adolescentes trasgresores de la ley, nos lleva a la conclusión de que no se trata de hechos o fenómenos que se presenten solamente en Colombia, la situación se muestra en  crecimiento en toda América Latina, lo cual  plantea un verdadero desafío para  la región.

En Colombia hay una distancia enorme entre el concreto marco jurídico y las prácticas del sistema, de Responsabilidad Penal Para Adolescentes.

El art. 140 de la ley 1098 consagra: “Tanto el proceso como las medidas que se toman son de carácter pedagógico, especifico y diferenciado, respecto del sistema de adultos conforme a la protección integral”.

El propósito de la ley es crear medidas restaurativas, que los alejen del sistema punitivo penal acusatorio, considerando a los menores infractores como víctimas de sus conductas siendo sujetos de Restablecimiento de Derechos.

Partiendo de lo anterior, el Estado y su política criminal deben garantizar los derechos de los menores de edad, a un desarrollo integral, y a la primacía del interés superior de los niños niñas y adolescentes.

El desarrollo de la ley es producto de las garantías consagradas en los arts. 9,10 y 44 de la Constitución Política, normas que obligan al Estado y a la sociedad a la protección de este grupo poblacional, resultando ser letra mojada.

El marco normativo se desarrolla acogiendo todos los tratados que tienen que ver con la protección de la infancia y la adolescencia que han sido ratificados por Colombia y que hacen parte del bloque de constitucionalidad,  entre ellos el Pacto Internacional de Derechos Civiles y políticos (1966), Declaración Universal de Derechos Humanos (1948), Convención de los Derechos del niño (1989), Reglas de las Naciones Unidas para  Prevención de la Delincuencia Juvenil, Reglas de RIAD (1990) que buscan la Protección de los adolescentes en riesgo, buscando alterativas de prevención y resocialización. Reglas de las Naciones Unidas para la protección de los menores Privados de la libertad.

Estamos cerca de cumplir un siglo de las declaraciones de la Unicef y seguimos empantanados.

Todas estas normas, y unas más, forman parte del conjunto de disposiciones que se incorporaron a las leyes colombianas, al definir la policía criminal aplicable a los menores infractores de ley penal.

Se preguntarán los lectores, ¿por qué tantas garantías? Porque Colombia es un Estado Social de Derecho que debe ser absolutamente garantista de los derechos humanos y de las libertades individuales (así sea solo en el papel). Y más aún, cuando se trata de niñas, niños y adolescentes, por razón del interés superior de los citados, quienes constituyen el futuro de la sociedad y deben obtener la mayor protección para que sean personas con madurez emocional, e intelectual que contribuyan al desarrollo de la sociedad. Seguimos estando solo en el papel.

La consolidación de la política criminal de los adolescentes y niños tiene que partir de un estado de madurez a la hora de cometer la conducta delictiva, por lo que es necesario tener en cuenta la supremacía del interés superior del menor de edad, permitiendo desarrollar un sistema reeducativo que evite su re victimización.

El propósito de la ley de no imponer una sanción penal, es el reconocimiento de que esta problemática posee un carácter estructural socioeconómico, basado en las condiciones de vida de los menores infractores, la mayoría de quienes está en el sistema, han sufrido abandono, vienen de hogares disfuncionales, muchos son habitantes de calle, drogadictos, pelafustanes; es cuando el Estado y la sociedad  debía acogerlos como familia, para garantizar a este grupo vulnerable, de manera estable y permanente las medidas restaurativas que la ley consagra.

Debemos reconocer que el buen propósito de la ley, en aplicación de las medidas restaurativas también ha fracasado, por cuanto, a través del Sistema de Responsabilidad, se han generado espacios de impunidad consiente por parte de los mismos actores delincuenciales quienes evaden la justicia a través del uso de los menores, a sabiendas que para ellos no hay penas intramurales prolongadas.

¿La sociedad se pregunta si es eficaz el tratamiento del Sistema de Responsabilidad Penal para los adolescentes vigente? O, si por el contrario la política se debe revisar para hacerla más severa, la severidad no cuenta porque la reacción y reactividad de los jóvenes es negativa y rebelde, la rebeldía proviene de la represión que reciben en los sitios de internamiento, que está ausente de ser restaurativa.

Es necesario revisar la política pública criminal aplicable a los infractores menores de edad, para evitar que los utilicen como instrumento las bandas criminales que no son pocas.

Lo anterior, debe ir de la mano con la intervención en políticas sociales comprometidas con la reeducación, resocialización, e inclusión social de los jóvenes adolescentes infractores de la ley o en riesgo de incurrir en violación de la misma.

Si el niño es la esperanza, el hombre será un triunfador.

Bucaramanga, 26 de enero de 2024

*Abogada y exrepresentante a la Cámara

Write comment (0 Comments)